El equipo de Sergio Hernández cayó por 79-75 en su debut en el Grupo A. En un duelo parejo, el conjunto nacional remontó una desventaja de 12 puntos pero un triple decisivo de Kleiza le puso fin a la ilusión. Emanuel Ginóbili fue el goleador del juego con 19 puntos. El martes próximo, el rival será Australia.
El seleccionado argentino de básquetbol cayó por 79-75 ante Lituania en su presentación en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. A pesar de haber batallado durante todo el reñido partido, válido por el Grupo A, el equipo nacional tropezó cuatro segundos del final y dejó una esperanza de mejoría con el correr de la competencia.
La eficacia perdió el duelo con la defensa en el arranque del encuentro, ya que ninguno de los dos equipos consiguió lastimar con sus ataques. En cambio, predominaron los reboteros (Luis Scola y Fabricio Oberto, por el lado argentino, y Ksistof Lavrinovic por el equipo europeo). El primer cuarto terminó a favor de Lituania por un apretado 14-11.
Argentina comenzó a levantar mayor vuelo cuando entró en juego Carlos Delfino, preciso a la hora de probar triples. El funcionamiento colectivo entregó buenas señales ya que todos mejoraron su producción. Por el lado rival, creció la figura de Sarunas Jasikevicius.
El marcador quedó 34-20 (parcial de 20-19 para Lituania en el segundo capítulo) cuando el entretiempo copó la escena. Los números de la primera mitad fueron el fiel reflejo de la paridad: una igualdad en los tiros de campo (12/32 contra 10/30) y 20 rebotes por lado.
El matiz del encuentro se reiteró en el tercer cuarto, que Argentina perdió por 17-15. La alta exigencia física del juego perjudicó a la Generación Dorada ya que todavía no alcanzó el ritmo ideal para demostrar todo el potencial. En el génesis del último segmento, Lituania amplió su superioridad a medida que crecieron las pérdidas del equipo de Sergio Hernández.
Pero la actitud ganadora que tiene como credencial la Generación Dorada le permitió igualar en 75 tras estar perdiendo por 12 puntos a poco del final. El responsable de esa reacción tuvo nombre y apellido: Emanuel Ginóbili. El escolta de San Antonio terminó como goleador al sumar 5/8 en dobles, 1/7 en triples y 6/6 en libres. Al esfuerzo de Manu se sumaron Oberto (9 puntos y 10 rebotes) y Nocioni (15 y 9).
La remontada no pudo ser y el sueño se deshilachó cuando Lituania liquidó el definitivo 79-75 con un triple de Kleiza. Un sabor amargo quedó en la boca de cada uno de los argentinos, que ya piensan en la revancha ante Australia, el próximo martes.
En el otro duelo válido por el Grupo A, Rusia le ganó 71-49 a Irán con Dzhon-Robert Kholden como goleador con 19 puntos. Por el Grupo B, España venció por 81-66 a Grecia en la redición de la final del Mundial de Japón 2006.
FUENTE: TYC SPORTS
La eficacia perdió el duelo con la defensa en el arranque del encuentro, ya que ninguno de los dos equipos consiguió lastimar con sus ataques. En cambio, predominaron los reboteros (Luis Scola y Fabricio Oberto, por el lado argentino, y Ksistof Lavrinovic por el equipo europeo). El primer cuarto terminó a favor de Lituania por un apretado 14-11.
Argentina comenzó a levantar mayor vuelo cuando entró en juego Carlos Delfino, preciso a la hora de probar triples. El funcionamiento colectivo entregó buenas señales ya que todos mejoraron su producción. Por el lado rival, creció la figura de Sarunas Jasikevicius.
El marcador quedó 34-20 (parcial de 20-19 para Lituania en el segundo capítulo) cuando el entretiempo copó la escena. Los números de la primera mitad fueron el fiel reflejo de la paridad: una igualdad en los tiros de campo (12/32 contra 10/30) y 20 rebotes por lado.
El matiz del encuentro se reiteró en el tercer cuarto, que Argentina perdió por 17-15. La alta exigencia física del juego perjudicó a la Generación Dorada ya que todavía no alcanzó el ritmo ideal para demostrar todo el potencial. En el génesis del último segmento, Lituania amplió su superioridad a medida que crecieron las pérdidas del equipo de Sergio Hernández.
Pero la actitud ganadora que tiene como credencial la Generación Dorada le permitió igualar en 75 tras estar perdiendo por 12 puntos a poco del final. El responsable de esa reacción tuvo nombre y apellido: Emanuel Ginóbili. El escolta de San Antonio terminó como goleador al sumar 5/8 en dobles, 1/7 en triples y 6/6 en libres. Al esfuerzo de Manu se sumaron Oberto (9 puntos y 10 rebotes) y Nocioni (15 y 9).
La remontada no pudo ser y el sueño se deshilachó cuando Lituania liquidó el definitivo 79-75 con un triple de Kleiza. Un sabor amargo quedó en la boca de cada uno de los argentinos, que ya piensan en la revancha ante Australia, el próximo martes.
En el otro duelo válido por el Grupo A, Rusia le ganó 71-49 a Irán con Dzhon-Robert Kholden como goleador con 19 puntos. Por el Grupo B, España venció por 81-66 a Grecia en la redición de la final del Mundial de Japón 2006.
FUENTE: TYC SPORTS
