César Insaurralde es un saladeño que reside y trabaja hace un par de años en el Distrito Federal de México, la capital mexicana recibió el impacto de un sismo de 7.1 en la escala de Richter el martes pasadas las 13 horas. El correntino dialogó de forma exclusiva con Radio Urbana y destacó que escuchó la alarma antisísmica, pero como la estaban probando horas antes pensó que se trataba de una nueva prueba. “De pronto todo comenzó a moverse, yo vivo en un departamento en un 3° piso y lo primero que hice fue tomar algunas cosas, buscar salvar a mis perros y comencé a bajar las escaleras”, dijo César al aire de “Un Día Perfecto”.
En bailarín y coreógrafo Cesar Insaurralde es saladeño, reside en México hace un par de años donde tiene una escuela de danzas y una compañía artística. Este martes cuando se disponía a empezar con sus clases habituales un fuerte temblor lo obligó a correr asustado por temor a derrumbe del edificio donde trabaja. Se trata de un sismo de 7.1 en la escala de Ritcher que afectó a varios estados del país azteca y que dejó más de 200 muertos hasta el momento.
En comunicación con Radio Urbana el saladeño contó acongojado el mal momento que le toco vivir.
“Tengo mi estudio en mi casa, mi escuela. Llegaron mis alumnos y a las 13 me puse a trabajar. Tengo 2 empleados en mi casa y solo sentimos el temblor y la alarma sonó, no hubo tiempo de bajar y de nada por eso mucha gente quedó atrapada porque no se anunció”, dijo el eximio bailarín.
El joven de unos 29 años de edad relató que vive en el 3° piso de un edificio que se mantuvo firme tras el terremoto de 1985, el cual dejó más de 10.000 mil víctimas fatales.
“Solo vez que se cae todo, que se rompe todo, un caos. Yo estoy en el Distrito Federal, en la zona roja del desastre. Mi edificio no se derrumbó pero se partió y hay grietas”, comentó Insaurralde conmovido.
“Cuando hay terremoto hay fuga de gas y eso es lo más peligroso. Hice 2 cuadras y veo caer edificios, no había comunicación, no hay luz, no hay agua, caen árboles, postes de luz y es realmente desesperante”, comentó el pupilo de la profesora de danzas Andrea Espíndola.
Ya en la parte final de la entrevista César llevó tranquilidad a todos los saladeños, donde tiene miles de conocidos, dejando en claro que está bien y ayudando a los hermanos mexicanos.
En comunicación con Radio Urbana el saladeño contó acongojado el mal momento que le toco vivir.
“Tengo mi estudio en mi casa, mi escuela. Llegaron mis alumnos y a las 13 me puse a trabajar. Tengo 2 empleados en mi casa y solo sentimos el temblor y la alarma sonó, no hubo tiempo de bajar y de nada por eso mucha gente quedó atrapada porque no se anunció”, dijo el eximio bailarín.
El joven de unos 29 años de edad relató que vive en el 3° piso de un edificio que se mantuvo firme tras el terremoto de 1985, el cual dejó más de 10.000 mil víctimas fatales.
“Solo vez que se cae todo, que se rompe todo, un caos. Yo estoy en el Distrito Federal, en la zona roja del desastre. Mi edificio no se derrumbó pero se partió y hay grietas”, comentó Insaurralde conmovido.
“Cuando hay terremoto hay fuga de gas y eso es lo más peligroso. Hice 2 cuadras y veo caer edificios, no había comunicación, no hay luz, no hay agua, caen árboles, postes de luz y es realmente desesperante”, comentó el pupilo de la profesora de danzas Andrea Espíndola.
Ya en la parte final de la entrevista César llevó tranquilidad a todos los saladeños, donde tiene miles de conocidos, dejando en claro que está bien y ayudando a los hermanos mexicanos.