El Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de Saladas decidirá este martes si recibe o no los 200 pesos a modo de premio que recibirá de parte del ejecutivo local. La semana pasada las aguas dentro del sindicato se dividieron, algunos optaron por aceptar el regalo y otros alzaron la voz y pidieron más, destacando que dentro de la comuna existe dinero suficiente.
Que los regalos no se eligen, mentira. El Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de Saladas entró la semana pasada en una feroz interna luego de conocer el monto de 200 pesos, que el intendente Daniel Alterats les ofreció como regalo de fin de año. Luego de que éste último se comprometiera casi públicamente el mes pasado, en el almuerzo que ofreció la municipalidad el día del empleado municipal.
Joaquín Ramírez Secretario General del gremio, luego de reunirse con el intendente llevó la propuesta a los demás integrantes del sindicato y a los empleados. Según pudo saber este diario la molestia surgió cuando algunos empleados que pertenecen al gremio mostraron conformidad con el monto.
“No puede ser que a nosotros que estamos en planta permanente nos toque lo mismo que a un contratado o PEM, y ¡nuestra antigüedad donde queda!”, dijo un empleado que exigió más dinero.
“Todos somos empleados municipales y salimos todos los días a trabajar, porque discriminar. Además si no recibimos ahora la ayuda la vamos a percibir recién en el mes de enero y la idea es amortiguar los gastos de las fiestas”, expresó un gremialista.
Para echarle más leña al fuego los concejales del Frente de Todos presentaron un proyecto que fue aprobado la semana pasada y en donde piden una asignación especial de 400 pesos.
“El municipio tiene dinero para hacerlo, en la cuenta del Banco Nación hay más de un millón y medio de pesos que bien pueden ser volcados en un regalo para los empleados”, dijo el concejal Hervín Olivera.
“Como el intendente tiene para pagar todos los meses cinco mil pesos de publicidad y no tiene para los empleados”, dijo el concejal Pisarello mientras mostraba a sus pares las facturas de los medios de comunicación.
Lo cierto y en definitiva es que quien decide es el intendente Alterats y fue tajante en sus apreciaciones. “Tengo 200 pesos para todos, sin distinción, más no”.
El martes referentes centrales del SOEMS tomarán la decisión si aceptan o no el monto y poder así pasar o no unas fiestas de navidad y año nuevo en paz y con la convicción de haber hecho lo correcto.
Joaquín Ramírez Secretario General del gremio, luego de reunirse con el intendente llevó la propuesta a los demás integrantes del sindicato y a los empleados. Según pudo saber este diario la molestia surgió cuando algunos empleados que pertenecen al gremio mostraron conformidad con el monto.
“No puede ser que a nosotros que estamos en planta permanente nos toque lo mismo que a un contratado o PEM, y ¡nuestra antigüedad donde queda!”, dijo un empleado que exigió más dinero.
“Todos somos empleados municipales y salimos todos los días a trabajar, porque discriminar. Además si no recibimos ahora la ayuda la vamos a percibir recién en el mes de enero y la idea es amortiguar los gastos de las fiestas”, expresó un gremialista.
Para echarle más leña al fuego los concejales del Frente de Todos presentaron un proyecto que fue aprobado la semana pasada y en donde piden una asignación especial de 400 pesos.
“El municipio tiene dinero para hacerlo, en la cuenta del Banco Nación hay más de un millón y medio de pesos que bien pueden ser volcados en un regalo para los empleados”, dijo el concejal Hervín Olivera.
“Como el intendente tiene para pagar todos los meses cinco mil pesos de publicidad y no tiene para los empleados”, dijo el concejal Pisarello mientras mostraba a sus pares las facturas de los medios de comunicación.
Lo cierto y en definitiva es que quien decide es el intendente Alterats y fue tajante en sus apreciaciones. “Tengo 200 pesos para todos, sin distinción, más no”.
El martes referentes centrales del SOEMS tomarán la decisión si aceptan o no el monto y poder así pasar o no unas fiestas de navidad y año nuevo en paz y con la convicción de haber hecho lo correcto.