El Gobierno asegura que dispondrá este año de recursos para cumplir con sus compromisos de deuda, no obstante lo cual el superávit primario, estimado en el equivalente a u$s9.500 millones, aparece como la variable más discutible, por la incertidumbre que despiera la crisis internacional. Pero esa no es la única fuente de recursos del Estado. "Es probable que deba extremar la utilización de fuentes como el Banco Central, el Nación y otros organismos del Estado". Así concluyó un análisis de Maxinver, que señaló que desde el Gobierno prevén contar con los recursos necesarios para honrar los compromisos que debe afrontar el Estado este año.
Un estudio privado asegura que las fuentes internas de financiamiento exceden en u$s3.000 millones los compromisos financieros del Estado. Surgen del superávit fiscal, financiamiento del BCRA, el BNA y la Anses
El Gobierno asegura que dispondrá este año de recursos para cumplir con sus compromisos de deuda, no obstante lo cual el superávit primario, estimado en el equivalente a u$s9.500 millones, aparece como la variable más discutible, por la incertidumbre que despiera la crisis internacional.
Pero esa no es la única fuente de recursos del Estado. "Es probable que deba extremar la utilización de fuentes como el Banco Central, el Nación y otros organismos del Estado". Así concluyó un análisis de Maxinver, que señaló que desde el Gobierno prevén contar con los recursos necesarios para honrar los compromisos que debe afrontar el Estado este año.
No obstante, a criterio de consultora, la significativa percepción de riesgo de los agentes económicos, implícita en la cotización de los títulos públicos, indica que existen dudas relevantes sobre las proyecciones y voluntad oficial de efectuar los ajustes necesarios para cumplir con las obligaciones mencionadas.
Compromisos por 18.800 millones de dólares
Para ello el Gobierno nacional prevé contar con un superávit de u$s9.500 M, lo que haría que necesite 9.300 millones para cerrar las cuentas.
En ese sentido, podría acudir a u$s3.800 M de adelantos transitorios del Banco Central; u$s1.500 M de préstamos del Banco Nación; u$s1.400 M de financiamiento del PAMI y de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses).
Además, sostiene el análisis de Maxinver, podría recibir otros u$s1.000 M del sistema bancario y el fondo actual de la Anses; y u$s900 M de organismos multilaterales, que refinanciarían más de la mitad de los vencimientos que con ellos se produzcan.
Margen de maniobra
Sin embargo, las dudas existen sobre la posibilidad de alcanzar el ahorro primario de u$s9.500 millones, no sólo porque los últimos datos de la Secretaría de Hacienda dieron un cuenta de un deterioro en los últimos meses de 2008, sino porque todavía no hay datos concluyentes para determinar los efectos de la crisis financiera internacional sobre las finanzas públicas de la Argentina.
En consecuencia, el secretario de Finanzas de la Nación podría echar mano a u$s800 M de extras del BCRA; otros u$s1.500 M del BNA; u$s1.300 M del PAMI y la Anses y u$s2.000 M del sistema bancario y el fondo actual de la Anses.
Aparte, queda el "colchón" de u$s3.000 M provenientes de los recursos reestatizados de las administradoras de fondos de jubilaciones y pensiones.
El Gobierno asegura que dispondrá este año de recursos para cumplir con sus compromisos de deuda, no obstante lo cual el superávit primario, estimado en el equivalente a u$s9.500 millones, aparece como la variable más discutible, por la incertidumbre que despiera la crisis internacional.
Pero esa no es la única fuente de recursos del Estado. "Es probable que deba extremar la utilización de fuentes como el Banco Central, el Nación y otros organismos del Estado". Así concluyó un análisis de Maxinver, que señaló que desde el Gobierno prevén contar con los recursos necesarios para honrar los compromisos que debe afrontar el Estado este año.
No obstante, a criterio de consultora, la significativa percepción de riesgo de los agentes económicos, implícita en la cotización de los títulos públicos, indica que existen dudas relevantes sobre las proyecciones y voluntad oficial de efectuar los ajustes necesarios para cumplir con las obligaciones mencionadas.
Compromisos por 18.800 millones de dólares
Para ello el Gobierno nacional prevé contar con un superávit de u$s9.500 M, lo que haría que necesite 9.300 millones para cerrar las cuentas.
En ese sentido, podría acudir a u$s3.800 M de adelantos transitorios del Banco Central; u$s1.500 M de préstamos del Banco Nación; u$s1.400 M de financiamiento del PAMI y de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses).
Además, sostiene el análisis de Maxinver, podría recibir otros u$s1.000 M del sistema bancario y el fondo actual de la Anses; y u$s900 M de organismos multilaterales, que refinanciarían más de la mitad de los vencimientos que con ellos se produzcan.
Margen de maniobra
Sin embargo, las dudas existen sobre la posibilidad de alcanzar el ahorro primario de u$s9.500 millones, no sólo porque los últimos datos de la Secretaría de Hacienda dieron un cuenta de un deterioro en los últimos meses de 2008, sino porque todavía no hay datos concluyentes para determinar los efectos de la crisis financiera internacional sobre las finanzas públicas de la Argentina.
En consecuencia, el secretario de Finanzas de la Nación podría echar mano a u$s800 M de extras del BCRA; otros u$s1.500 M del BNA; u$s1.300 M del PAMI y la Anses y u$s2.000 M del sistema bancario y el fondo actual de la Anses.
Aparte, queda el "colchón" de u$s3.000 M provenientes de los recursos reestatizados de las administradoras de fondos de jubilaciones y pensiones.