NOTA DE OPINIÓN – Luego de lo acontecido en la tarde del viernes en el club Antorcha, cuando el presidente Romero expulsó a los integrantes de la Selección Saladeña que jugará ante Regatas, el hecho habla por si solo y no hace más que ratificar las irregularidades y la inoperancia con las que se maneja este dirigente con la institución.
Partiendo desde la base: el Club Social y Deportivo Antorcha es una institución con Personería Jurídica, y esto implica que en los papeles posee una comisión, que en este caso es ficticia, porque por malos procederes, varios de sus miembros se retiraron del club y no quedaron certificados por escrito de sus renuncia.
Para las organizaciones sociales, cualquiera sea su tipo, es de vital trascendencia contar con la personería jurídica ya que es el medio por el cual se pueden efectuar actos jurídicos en nombre y representación de la misma sin que se vea afectada la individualidad de sus miembros.
¿Individualidades no? Esa es la forma en la que el presidente Emilio Romero opera esta prestigiosa e histórica institución. Con este hecho lamentable que lo sufrió el equipo y su entrenador salen a la luz esas anomalías.
Es que a caso, ¿Romero no pensó? que: la mayoría de los integrantes de este seleccionado que entrenaba en el estadio de calle Mitre son de Antorcha; que Carlos Miño (h) el año pasado se arriesgó a jugar con el club el Provincial de Mayores en Esquina, que el solo gestionó su préstamo para estar y se bancó dos meses sin jugar con el Juventus que es el equipo que le dió la posibilidad de seguir su carrera y continuar sus estudios; qué tanto Ramón Pujol (si bien no presente en este seleccionado) como Diego Domínguez dejaron sus ocupaciones laborales por la camiseta y viajar un fin de semana completo a disputar el Pentagonal; que si bien José Miguel Pérez González es de Atlético pero a su vez el rango de funcionario publico lo llevó a brindarle apoyo cuando Antorcha organizó el triangular de Pre-Infantiles valido por el Provincial; no pensó que Martín Fernández es un jugador que le dió miles de alegrías y satisfacciones al club como para enfatizar su desinterés que hoy este en Regatas y pueda superarse. Por solo nombrar algunos detalles que tiene y mucho que ver con su equivocación.
Lo más triste: es la Selección Saladeña la que está en juego y va a representar al pueblo ante un equipo que pertenece a un club ejemplar a nivel provincial y nacional como Regatas. Se vienen fechas importantes y ya que la Federación Correntina está inactiva, en Saladas se intenta seguir adelante para incentivar a los deportistas y que estos no abandonen la práctica de este deporte que todavía no encuentra límites de pasión en el mundo.
Por último: Juan Carlos Arregín, “Muñeca” Pisarello, el doctor Juan Manuel Pellegrini, como tantos otros miembros de la actual “comisión”, abandonaron la misma por incoherencias del presidente. Por el estatuto, estas personas tendrían que volver solicitar un balance, llamar a elecciones o bien incorporarse nuevamente al club para sacar adelante a Antorcha pasión de multitudes y que sea realmente un CLUB y no un lugar de intereses personales y familiares donde la transparencia brilla por su ausencia.
Por Cesar González Francini
Para las organizaciones sociales, cualquiera sea su tipo, es de vital trascendencia contar con la personería jurídica ya que es el medio por el cual se pueden efectuar actos jurídicos en nombre y representación de la misma sin que se vea afectada la individualidad de sus miembros.
¿Individualidades no? Esa es la forma en la que el presidente Emilio Romero opera esta prestigiosa e histórica institución. Con este hecho lamentable que lo sufrió el equipo y su entrenador salen a la luz esas anomalías.
Es que a caso, ¿Romero no pensó? que: la mayoría de los integrantes de este seleccionado que entrenaba en el estadio de calle Mitre son de Antorcha; que Carlos Miño (h) el año pasado se arriesgó a jugar con el club el Provincial de Mayores en Esquina, que el solo gestionó su préstamo para estar y se bancó dos meses sin jugar con el Juventus que es el equipo que le dió la posibilidad de seguir su carrera y continuar sus estudios; qué tanto Ramón Pujol (si bien no presente en este seleccionado) como Diego Domínguez dejaron sus ocupaciones laborales por la camiseta y viajar un fin de semana completo a disputar el Pentagonal; que si bien José Miguel Pérez González es de Atlético pero a su vez el rango de funcionario publico lo llevó a brindarle apoyo cuando Antorcha organizó el triangular de Pre-Infantiles valido por el Provincial; no pensó que Martín Fernández es un jugador que le dió miles de alegrías y satisfacciones al club como para enfatizar su desinterés que hoy este en Regatas y pueda superarse. Por solo nombrar algunos detalles que tiene y mucho que ver con su equivocación.
Lo más triste: es la Selección Saladeña la que está en juego y va a representar al pueblo ante un equipo que pertenece a un club ejemplar a nivel provincial y nacional como Regatas. Se vienen fechas importantes y ya que la Federación Correntina está inactiva, en Saladas se intenta seguir adelante para incentivar a los deportistas y que estos no abandonen la práctica de este deporte que todavía no encuentra límites de pasión en el mundo.
Por último: Juan Carlos Arregín, “Muñeca” Pisarello, el doctor Juan Manuel Pellegrini, como tantos otros miembros de la actual “comisión”, abandonaron la misma por incoherencias del presidente. Por el estatuto, estas personas tendrían que volver solicitar un balance, llamar a elecciones o bien incorporarse nuevamente al club para sacar adelante a Antorcha pasión de multitudes y que sea realmente un CLUB y no un lugar de intereses personales y familiares donde la transparencia brilla por su ausencia.
Por Cesar González Francini