La Presidenta anunció que firmó el decreto que crea la Autoridad de Aplicación de la ley de Comunicación Audiovisual, que reemplaza al COMFER, y la entrada en vigencia Radio y Televisión Argentina Sociedad del Estado .
Cristina afirmó que "se han caído mitos, como por ejemplo el de la libertad de prensa independiente" y remarcó: "En algunos medios sólo se escuchaban voces contrarias a la ley" de Comunicación Audiovisual.
La presidenta graficó así el debate que se dio en torno a la ley de Comunicación Audiovisual aprobada por el Parlamento, al encabezar un acto en el Teatro Argentino de La Plata, donde quedó constituida la Autoridad Federal de Aplicación de la nueva norma.
"Este instrumento va a servir para que todas las voces tengan la posibilidad de expresarse libremente. Por eso construimos un instrumento colectivo y federal donde se reflejen todos y cada uno de los sectores, pueblos originarios, actores, periodistas, organizaciones de derechos humanos, cooperativas", sostuvo.
Tras destacar que esta ley "clausura otra etapa de la dictadura", la presidenta señaló que hay dos leyes que no fueron autoria de este gobierno o del anterior.
Así, mencionó la derogación de las leyes de obediencia debida y punto final "que se la debemos a esas mujeres de pañuelos blancos" y "esta otra, que es de ustedes, de la coalición democrática, de las organizaciones libres del pueblo, de actores, periodistas, que incansablemente lucharon para llegar a este resultado. Nosotros fuimos el instrumento político".
También agradeció a "los periodistas, que siempre fueron críticos, pero supieron separar lo que era este instrumento de la democracia".
Además, agradeció "a los partidos políticos de la oposición que mantuvieron diferencias, pero supimos construir los consensos necesarios para aprobar este instrumento por mayorías nunca vistas en diputados y senadores".
La presidenta dijo que fue "una batalla cultural profunda porque se había instalado que no era posible resistir la presión mediática de los grandes monopolios".
"Voy a dar todas las batallas para combatir la pobreza, la desigualdad", agregó. "Quiero contribuir a seguir construyendo consensos", indicó y en ese sentido anunció el lanzamiento de la reforma política.
La presidenta también sostuvo que "se ha caído el mito en cuanto a que no podíamos construir consensos" y al respecto mencionó las 200 modificaciones que se hicieron a la ley. "Las vivimos como construcciones, no como concesiones", dijo.
"Necesitamos también que los partidos políticos que tienen representación popular en las cámaras hagan honor a sus plataformas. En la coherencia con las doctrinas es también posible construir una Argentina que vuelva a creer que la política es la que puede cambiar la realidad", añadió.
"Esta presidenta no guarda rencor a nadie, cuanto mas gente sumemos a esta convicción democrática, vamos a estar haciendo honor a tantos argentinos que dieron su vida para construir una Argentina mejor y ni siquiera sabemos donde están", subrayó.
"Convoco a seguir construyendo consensos como este, es la clausura de otra etapa de la dictadura. Nos falta también la mas importante, la lucha por redistribución del ingreso que se empezó a modificar dramáticamente en 1976", enfatizó.
Y agregó que "estoy segura que en algún momento y sin renunciar a identidades nos vamos a estrechar en un fuerte abrazo", finalizó.
La presidenta graficó así el debate que se dio en torno a la ley de Comunicación Audiovisual aprobada por el Parlamento, al encabezar un acto en el Teatro Argentino de La Plata, donde quedó constituida la Autoridad Federal de Aplicación de la nueva norma.
"Este instrumento va a servir para que todas las voces tengan la posibilidad de expresarse libremente. Por eso construimos un instrumento colectivo y federal donde se reflejen todos y cada uno de los sectores, pueblos originarios, actores, periodistas, organizaciones de derechos humanos, cooperativas", sostuvo.
Tras destacar que esta ley "clausura otra etapa de la dictadura", la presidenta señaló que hay dos leyes que no fueron autoria de este gobierno o del anterior.
Así, mencionó la derogación de las leyes de obediencia debida y punto final "que se la debemos a esas mujeres de pañuelos blancos" y "esta otra, que es de ustedes, de la coalición democrática, de las organizaciones libres del pueblo, de actores, periodistas, que incansablemente lucharon para llegar a este resultado. Nosotros fuimos el instrumento político".
También agradeció a "los periodistas, que siempre fueron críticos, pero supieron separar lo que era este instrumento de la democracia".
Además, agradeció "a los partidos políticos de la oposición que mantuvieron diferencias, pero supimos construir los consensos necesarios para aprobar este instrumento por mayorías nunca vistas en diputados y senadores".
La presidenta dijo que fue "una batalla cultural profunda porque se había instalado que no era posible resistir la presión mediática de los grandes monopolios".
"Voy a dar todas las batallas para combatir la pobreza, la desigualdad", agregó. "Quiero contribuir a seguir construyendo consensos", indicó y en ese sentido anunció el lanzamiento de la reforma política.
La presidenta también sostuvo que "se ha caído el mito en cuanto a que no podíamos construir consensos" y al respecto mencionó las 200 modificaciones que se hicieron a la ley. "Las vivimos como construcciones, no como concesiones", dijo.
"Necesitamos también que los partidos políticos que tienen representación popular en las cámaras hagan honor a sus plataformas. En la coherencia con las doctrinas es también posible construir una Argentina que vuelva a creer que la política es la que puede cambiar la realidad", añadió.
"Esta presidenta no guarda rencor a nadie, cuanto mas gente sumemos a esta convicción democrática, vamos a estar haciendo honor a tantos argentinos que dieron su vida para construir una Argentina mejor y ni siquiera sabemos donde están", subrayó.
"Convoco a seguir construyendo consensos como este, es la clausura de otra etapa de la dictadura. Nos falta también la mas importante, la lucha por redistribución del ingreso que se empezó a modificar dramáticamente en 1976", enfatizó.
Y agregó que "estoy segura que en algún momento y sin renunciar a identidades nos vamos a estrechar en un fuerte abrazo", finalizó.