Policías llevan adelante actuaciones investigativas en relación a un hecho delictivo que damnificara al Instituto Terciario Superior que funciona en Mburucuyá. Violentaron las maderas de una estructura de la puerta, ocasionando en el lugar un gran desorden de libros, documentaciones varias, apoderándose de la suma de doscientos pesos. Funcionarios policiales con prestación de servicio en la Comisaría de distrito Mburucuya; llevan adelante actuaciones investigativas en relación a un hecho delictivo que damnificara al Instituto Terciario Superior que funciona en esa localidad.
El mismo se habría registrado el dia lunes, alrededor de las 19:00 horas aproximadamente, en circunstancias de manifestar a las autoridades policiales el coordinador del referido Instituto, un hombre de apellido SOSA (mayor de edad), quien manifestó que personas de identidad desconocidas habrían ingresado al interior de las oficinas, previo a violentar las maderas de una estructura de la puerta, ocasionando en el lugar un gran desorden de libros, documentaciones varias, apoderándose de la suma de doscientos pesos que se hallaban guardados en el lugar, en uno de los muebles de la oficina.
De acuerdo a las primeras investigaciones realizadas, dos menores de 11 años de edad, tendrían relación directa con el presente caso. Al respecto se continúan con diversas acciones a fin de establecer fehacientemente los autores del supuesto hecho delictivo.
Dos niños de 11 años robaron 200 pesos, lápices, tizas, cuadernos y agendas de un instituto educativo de la localidad de Mburucuyá. La policía local investigó y logró capturar a los chicos que fueron trasladados al Juzgado de Menores de Saladas, donde se les tomó declaración y, tras ser atendidos por un psicólogo, fueron liberados. Los chicos ingresaron al establecimiento por el techo en la siesta del domingo; violentaron una puerta y recorrieron las instalaciones hasta dar con la sala de dirección, en donde encontraron una caja que contenía lo recaudado por la cooperadora. Eran sólo 200 pesos y como les resultó escaso decidieron llevarse un par de cajas de lápices, biromes, tizas, borradores, cuadernos y agendas.
Raúl Sosa, coordinador del Instituto Superior Mburucuyá, fue quien se encontró con los desmanes realizados por los niños, ya que no sólo robaron elementos sino que también se encargaron de tirar al piso libros, documentación y otros. Inmediatamente realizó la denuncia y la policía local realizó el peritaje correspondiente. Tras recabar información, la policía logró dar con los sospechosos y allanaron la vivienda donde se encontraban los menores. Ahí estaban los elementos robados. Pero no los 200 pesos, según informaron fuentes policiales de la localidad.
Los menores fueron trasladados al Juzgado de Saladas, donde se les tomó declaración y fueron vistos por un psicólogo; después fueron puestos en libertad y entregado a sus padres. “No se puede hacer otra cosa cuando son menores”, dijo un policía a La República.
FOTO: EME NOTICIAS.-
De acuerdo a las primeras investigaciones realizadas, dos menores de 11 años de edad, tendrían relación directa con el presente caso. Al respecto se continúan con diversas acciones a fin de establecer fehacientemente los autores del supuesto hecho delictivo.
Dos niños de 11 años robaron 200 pesos, lápices, tizas, cuadernos y agendas de un instituto educativo de la localidad de Mburucuyá. La policía local investigó y logró capturar a los chicos que fueron trasladados al Juzgado de Menores de Saladas, donde se les tomó declaración y, tras ser atendidos por un psicólogo, fueron liberados. Los chicos ingresaron al establecimiento por el techo en la siesta del domingo; violentaron una puerta y recorrieron las instalaciones hasta dar con la sala de dirección, en donde encontraron una caja que contenía lo recaudado por la cooperadora. Eran sólo 200 pesos y como les resultó escaso decidieron llevarse un par de cajas de lápices, biromes, tizas, borradores, cuadernos y agendas.
Raúl Sosa, coordinador del Instituto Superior Mburucuyá, fue quien se encontró con los desmanes realizados por los niños, ya que no sólo robaron elementos sino que también se encargaron de tirar al piso libros, documentación y otros. Inmediatamente realizó la denuncia y la policía local realizó el peritaje correspondiente. Tras recabar información, la policía logró dar con los sospechosos y allanaron la vivienda donde se encontraban los menores. Ahí estaban los elementos robados. Pero no los 200 pesos, según informaron fuentes policiales de la localidad.
Los menores fueron trasladados al Juzgado de Saladas, donde se les tomó declaración y fueron vistos por un psicólogo; después fueron puestos en libertad y entregado a sus padres. “No se puede hacer otra cosa cuando son menores”, dijo un policía a La República.
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