Finalmente llegó el día. Roberto y Dennis, la flamante pareja del mismo sexo, consumaba ayer su amor al cierre de esta edición. Más de 250 invitados concurrían a la fiesta. Se trata de un hecho histórico en la provincia. Aún el tema despierta algunas polémicas.
Bien podría decirse que este casamiento fue "contra la corriente" y luego de tantas polémicas en torno al tema ayer (al cierre de esta edición) finalmente se celebraba la primera boda entre personas del mismo sexo en una tierra arraigadamente conservadora y religiosa. Sin dudas, este casamiento será parte de la historia de la provincia, una historia que hoy es testigo del enlace matrimonial entre el correntino Roberto Williams Sánchez y el belga Dennis De Buyst. La glamorosa fiesta estaba prevista realizarse en el local bailable Castillo Robert ubicado en pasaje Santa Julia 1650.
"Estoy relajado, en mi sofá esperando tranquilo mi boda", expresó Roberto, en las horas previas a la celebración y agregó: "¡Me casooo!". Si bien no es su primera boda (ya se casaron en Bélgica), es muy especial para ambos por el lugar, el contexto social y familiar y la incansable lucha que emprendieron juntos reclamando la igualdad de condiciones por medio de la Ley de Matrimonio Igualitario, aprobada el 15 de julio en el Senado de la Nación.
La boda estaba llena de sorpresas y de los pocos detalles que adelantó la pareja se la vio por la Costanera correntina sacándose fotos y paseando en limusina. "Queremos que sea algo especial, una fiesta maravillosa", contó Roberto desde su casa en el acceso a Santa Ana durante la siesta, previo al casamiento.
Por el lado de Roberto, todos sus familiares asistirían a este importante evento, en cambio por el lado de Dennis, la distancia fue una gran barrera para que los familiares y amigos de Bélgica puedan asistir. Sólo dos hermanas del extranjero habían confirmado su asistencia ya que sus padres, quienes querían conocer Corrientes, no pudieron venir.
Roberto, correntino de ley
No caben dudas de que es un hecho muy especial para el correntino, no sólo por todo lo que conlleva casarse, sino por tratarse de un evento histórico para la provincia que estrena la Ley de Matrimonio Igualitario.
Roberto nació en esta ciudad, sus estudios comenzaron en el Jardín de Infantes de la Escuela Nº10 Remedios de Escalada. En la primaria asistió a la escuela Centenario mientras que la secundaria estudió en el colegio Misericordia. También, durante su adolescencia practicó rugby, un deporte elite en un club extremadamente conservador como el Aranduroga. "Jugué de ala (posición en el rugby entre los más fuertes) por muchos años", dijo Roberto.
Durante su adolescencia fue tarjetero de boliches y hasta estuvo de novio con mujeres. "Mujeres nunca me faltaron, tuve novia pero siempre fue una pantalla, era una pelea constante conmigo mismo", relató hace un par de meses durante una entrevista exclusiva con "época", en su hogar. Sin embargo, envuelto de miedos y secretos por su condición sexual, dejó la provincia y viajó a Buenos Aires teniendo sólo 18 años. Allí estudió teatro con Lito Cruz, una vocación que ardía dentro suyo desde muy pequeño. Después fue a California, Estados Unidos, para seguir estudiando. Posteriormente se radicó en Europa (Inglaterra y España), en el viejo continente, donde conoció a Dennis (11 años mayor que él, chef profesional), con quien convive desde hace 12 años.
"Más adelante, después de nuestro enlace, podríamos adoptar un hijo, pero por ahora no, estamos muy concentrados es difundir estos nuevos derechos, es emocionante ver que la comunidad gay logró un anhelo de años que a fin de cuentas es de toda la sociedad", culminó Roberto.
"Estoy relajado, en mi sofá esperando tranquilo mi boda", expresó Roberto, en las horas previas a la celebración y agregó: "¡Me casooo!". Si bien no es su primera boda (ya se casaron en Bélgica), es muy especial para ambos por el lugar, el contexto social y familiar y la incansable lucha que emprendieron juntos reclamando la igualdad de condiciones por medio de la Ley de Matrimonio Igualitario, aprobada el 15 de julio en el Senado de la Nación.
La boda estaba llena de sorpresas y de los pocos detalles que adelantó la pareja se la vio por la Costanera correntina sacándose fotos y paseando en limusina. "Queremos que sea algo especial, una fiesta maravillosa", contó Roberto desde su casa en el acceso a Santa Ana durante la siesta, previo al casamiento.
Por el lado de Roberto, todos sus familiares asistirían a este importante evento, en cambio por el lado de Dennis, la distancia fue una gran barrera para que los familiares y amigos de Bélgica puedan asistir. Sólo dos hermanas del extranjero habían confirmado su asistencia ya que sus padres, quienes querían conocer Corrientes, no pudieron venir.
Roberto, correntino de ley
No caben dudas de que es un hecho muy especial para el correntino, no sólo por todo lo que conlleva casarse, sino por tratarse de un evento histórico para la provincia que estrena la Ley de Matrimonio Igualitario.
Roberto nació en esta ciudad, sus estudios comenzaron en el Jardín de Infantes de la Escuela Nº10 Remedios de Escalada. En la primaria asistió a la escuela Centenario mientras que la secundaria estudió en el colegio Misericordia. También, durante su adolescencia practicó rugby, un deporte elite en un club extremadamente conservador como el Aranduroga. "Jugué de ala (posición en el rugby entre los más fuertes) por muchos años", dijo Roberto.
Durante su adolescencia fue tarjetero de boliches y hasta estuvo de novio con mujeres. "Mujeres nunca me faltaron, tuve novia pero siempre fue una pantalla, era una pelea constante conmigo mismo", relató hace un par de meses durante una entrevista exclusiva con "época", en su hogar. Sin embargo, envuelto de miedos y secretos por su condición sexual, dejó la provincia y viajó a Buenos Aires teniendo sólo 18 años. Allí estudió teatro con Lito Cruz, una vocación que ardía dentro suyo desde muy pequeño. Después fue a California, Estados Unidos, para seguir estudiando. Posteriormente se radicó en Europa (Inglaterra y España), en el viejo continente, donde conoció a Dennis (11 años mayor que él, chef profesional), con quien convive desde hace 12 años.
"Más adelante, después de nuestro enlace, podríamos adoptar un hijo, pero por ahora no, estamos muy concentrados es difundir estos nuevos derechos, es emocionante ver que la comunidad gay logró un anhelo de años que a fin de cuentas es de toda la sociedad", culminó Roberto.
