La fuerte llovizna de todo el día de ayer y hoy causa estragos en la calle Coronel Blanco y dificulta en gran medida el ingreso de los colectivos a la Terminal de Ómnibus. Resulta que la ancha Avenida esta solamente asfaltada un tramo, por lo que alrededor de seis cuadras es todo barro, y algunos chóferes de los micros no se animan a ingresar a la ciudad por ese lugar.
Del polvo al lodo y del lodo al polvo. Claro, días atrás muchos vecinos del Barrio Don Bosco se quejaban ante los medios de comunicación de la gran contaminación que causaba aspirar el basto polvo que levantaban los mismos micros y vehículos que transitaban por la arenosa y polvorienta avenida Coronel Blanco, hoy todo cambio. El tratar de hermosear, arreglarla, hacer estable y transitada la avenida Coronel Blanco, lugar de ingreso de los micros de corta y larga distancia a la nueva Terminal Sargento Cabral, termino por crear en la misma, un calle que al pasar de vehículos levantaba polvo que repercutía en la salud de muchos vecinos del populoso barrio Don Bosco, que como acción de reflejo cerraban sus hogares de forma hermética para que el molesto y sucio polvo no ingresase. Ahora con la lluvia de ayer y la fuerte llovizna de todo el día de hoy, el molesto polvo se transformo en una especie de lodo, que hace que los vecinos sigan tal vez encerrados en sus hogares al no encontrar la manera de cruzar la calle. Ni opinar de los micros que ingresan a la ciudad, al ver que la misma esta intransitable, sucia y muy barrosa, la mayoría de ellos ingresan por el centro de la ciudad, evitando el barro y la ancha avenida.
