El Presidente llamó a imprimirle al bloque regional "mayor dinamismo y potencia que permitan superar las dicusiones". Sobre las asimetrías en la región, dijo que "se puede actuar más y mejor", y pidió asignar a proyectos concretos los fondos creados por el bloque para las economías de menor escala.
El presidente Néstor Kirchner resaltó que, "con dificultades, el Mercosur sigue siendo nuestra gran fortaleza" y pidió imprimirle al bloque regional "mayor dinamismo y mayor potencia que permitan superar las discusiones". "Todos los gobiernos citaron la integración como punto central de sus agendas. Sin embargo, los ritmos y profundidades de los avances no responden siempre con contundencia", agregó el Presidente durante su discurso de cierre de la trigesimotercera cumbre de Jefes de Estado del Mercosur. Kirchner consideró que uno de los desafíos más importantes de los presidentes de la región es hacer comprender a sus pueblos que "sin Mercosur será más difícil". Lo que sucede es que "la construcción del Mercosur no es vista en nuestras sociedades como un acontecimiento que influya sobre sus vidas cotidianas y su futuro", explicó. El presidente argumentó que los problemas de la región son similares, pidió "no encerrarnos en las escalas de nuestros países" y llamó a tener "audacia, decisión, coraje, tomar decisiones que ordenen el funcionamiento global del Mercosur". El jefe de Estado consideró que "empleo, producción, inclusión, cuidado del ambiente e inserción en el mundo" son los grandes temas en las agendas nacionales y pidió "entrelazar estas agendas de nuestras sociedades con el bloque". Asimismo, Kirchner celebró el anuncio hecho por Uruguay de su incorporación al proyecto del Banco del Sur y afirmó que si esta entidad "cumple el rol que tiene que cumplir podremos dar pasos importantes para resolver problemas". El presidente hizo énfasis en varios tramos de su discurso en la necesidad de fortalecer el Mercosur "sin ceder a miradas apocalípticas" y llamó a pensar el bloque "con realismo y espíritu constructivo". Sobre las asimetrías en la región, Kirchner dijo que "se puede actuar más y mejor", pidió asignar a proyectos concretos los fondos creados por el bloque para las economías de menor escala y señaló que "las asimetrías no son las que existen en otras regiones. Los países más grandes del Mercosur son países que también tienen enormes desigualdades". Kirchner señaló que la verdadera solución al problema de las asimetrías vendrá de la mano de la "ampliación del mercado, hablamos de la concepción de un gran mercado interno ampliado, un programa de producción que comprometa a universidades y empresas". El presidente también convocó a "coordinar "políticas macroeconómicas y tributarias" y revisar el arancel externo común en los casos en que no resulte "adecuado" a la estructura productiva de los países. En el tramo de su discurso que dedicó a repasar los aspectos económicos del Mercosur, Kirchner dijo que "la clave está en avanzar en la integración productiva regional" y "articular esfuerzos para colocar productos fuera de la región". También pidió que el Mercosur haga esfuerzos para reducir las restricciones que tienen los productos de la región para poder ingresar a los países centrales. En este sentido, el presidente pidió un "cronograma de negociaciones con grandes países y regiones del mundo y remarcó que "necesitamos avanzar hacia la globalización con autonomía, con sólidas instituciones de carácter regional". Por último, Kirchner reconoció que el bloque tiene "asignaturas pendientes" y consideró que la integración debe darse no sólo a nivel económico sino también a nivel social y educativo. "Un Mercosur así interesará a nuestros pueblos. Nadie es tan grande como para no necesitar ayuda ni nadie es tan pequeño como para no poder hacer un aporte", remató el presidente.