Se impuso 4-2 con goles de Crespo (PT 19m), de penal, Riquelme (PT 33m y PT 45m), uno de cabeza y otro de tiro libre, y Diego Milito (ST 46m). Edixon Perea (PT 9m) y Castrillón (ST 27m) marcaron para los cafeteros.
Para gozar, primero hay que sufrir. Esta parece ser la consigna de la Selección Argentina del Coco Basile al cabo de las primeras dos presentaciones en la Copa América. Si bien derrotó a Estados Unidos y Colombia y ya se clasificó a los cuartos de final, el combinado nacional arrancó abajo en el marcador en ambos encuentros y dejó muchas dudas en defensa. Eso sí, arriba es letal: lleva marcados ocho goles. En los primeros minutos de partido, Argentina la pasó muy mal porque Colombia, con mucha actitud y algo de fútbol, ocupó muy bien todos los sectores de la cancha, controló la pelota e impidió el encuentro entre Verón, Riquelme y Messi. Los dirigidos por Pinto también abusaron del juego brusco para frenar los intentos del equipo conducido por Basile. Sin embargo, la Selección tuvo la primera chance clara del encuentro con un cabezazo de Crespo que pegó en el travesaño, la pelota picó en la línea y salió. Colombia no tardó en responder y gracias a una jugada preparada, se puso en ventaja: Vargas habilitó a Ferreira, éste remató de primera y Edixon Perea, con el taco, desvió el balón en el camino y descolocó a Abbondanzieri. Tal como había sucedido contra Estados Unidos, el combinado nacional se encontró tempranamente abajo en el marcador y reaccionó rápido. Esta vez contó con la colaboración del árbitro Simón, que le regaló un penal tras una inexistente falta de Rodallega a Messi (si había que cobrar algo, era jugada peligrosa). Crespo lo cambió por gol y de inmediato pidió el cambio porque sintió un tirón en la pierna derecha. El empate agrandó a Argentina y frustró a Colombia. Empezaron a aparecer Verón y Riquelme, mientras que Zanetti se animó y comenzó a ser decisivo con sus trepadas por la banda derecha. El Pupi, en una de sus corridas, mandó un centro perfecto al corazón del área y Riquelme, de cabeza, anotó el segundo. Antes del cierre de la primera parte, Román clavó un tiro libre contra el palo izquierdo de Calero y puso el 3-1. Los dos tantos de ventaja que sacó Argentina antes del entretiempo hicieron que el arranque del segundo tiempo fuera lento y con escasas emociones. En la primera media hora, la Selección manejó la pelota sin problemas, pero no fue profunda y se quedó en el toqueteo en la mitad de la cancha. En la única aproximación seria, Riquelme combinó con Cambiasso y Calero le ahogó el grito a Milito abajo del arco. El equipo de Basile estuvo tranquilo hasta los 25 minutos, momento en que Colombia abandonó la postura pasiva, perdió el temor de ser goleada y fue en busca del descuento. El empuje de los cafeteros desnudó las falencias defensivas del combinado nacional y hubo que sufrir para sumar de a tres y lograr la clasificación a cuartos de final. Castrillón, de cabeza, le puso suspenso al final del partido, pero la expulsión de Vargas y el gol de Milito le dieron tranquilidad al Coco y sus players.