El martes por la noche los concejales terminaron aprobando un proyecto de ordenanza presentado por el ejecutivo municipal, para la compra de un terreno para una futura planta de reciclado de residuos sólidos urbanos. El intendente dialogó sobre este tema con saladas informa y explico que solo se dio el primer paso y destacó “este es un proyecto a largo plazo”.
En una entrevista concedida por el intendente Alterats a Saladas Informa, el mismo comento los alcances, el monto estimado y más detalladamente para que servirá la futura planta que se pretende construir en las afueras de la ciudad. La cual ya ha tenido su paso inicial en la sesión del martes pasado, donde los ediles aprobaron la compra de un terreno donde la misma se edificaría. “Esta es una deuda que teníamos hace muchos años los saladeños de hoy con los del futuro, ya que hace muchísimos años se vienen depositando los residuos en un lugar que no es el apropiado, en una ruta provincial que no se usa, pero ruta al fin y a cielo abierto, causando la contaminación del medio ambiente y perjudicando a mucha gente de la zona”, recalcó Alterats. Por lo que anteriormente comento el ejecutivo municipal, la Municipalidad de Saladas adquirió un terreno de 18 hectáreas y media, ubicada a unos tres kilómetros de la localidad de Saladas, por ruta provincial 13 a donde llega además la luz eléctrica. El primer mandatario saladeño dejó en claro también cual seria el monto estimado para esta planta, y destacó que una planta mediana rondaría más de un millón de pesos, que funcionaria en principio con las cosas básicas y después se agregarían los utensilios restantes. “Quiero que quede claro que este es el paso inicial, el proceso es largo, aya que acá intervienen organismos relacionados con el medio ambiente que son los que hacen el estudio del impacto ambiental y finaliza una vez hecho todos los estudios con una audiencia pública donde los vecinos toman cartas en el asunto y autorizan la instalación de la planta”, agregó el intendente. El fin de la planta será recuperar todo lo que se tira y no tener así un impacto ambiental. Se reciclará cartón, vidrio, latas, plásticos y todo lo que se pueda reciclar. Lo orgánico pasará a un proceso de compostado, un abono de alta calidad y ecológico. Alterats volvió a reiterar que el proyecto ambicioso es a largo plazo, “para que se den una idea, una de las plantas modelos en la provincia es la de Curuzú Cuatía, que empezó nueve años atrás y hoy recién esta funcionando medianamente bien”.