Tienen entre 15 y 19 mil pesos mensuales de gastos para poder cubrir los llamados de emergencia, por incendios o accidentes en la localidad y parajes aledaños. Con mayor urgencia precisan recaudar dinero para cubrir el arreglo de un vehículo que les fue cedido por la Provincia para realizar sus tareas.
EL DATO
En lo que va del año, desde el cuartel se realizaron en promedio, por mes, 34 salidas por incendios, 7 por accidentes viales y 4 por otros servicios.
Los Bomberos Voluntarios de Saladas necesitan juntar, por lo menos, 1.000 socios que colaboren para el sostenimiento de las actividades, que en bien de la comunidad realizan desinteresadamente los 365 días del año. El cuartel se mantiene con subsidios oficiales y el aporte de unas 150 personas. Con eso atienden los requerimientos de los 20 mil habitantes de la localidad y de los parajes aledaños.
“La realidad es que la situación económica general nos afecta notablemente, por la gran cantidad de emergencias que tuvimos, que nos demandaron un alto costo de combustible, y tuvimos vehículos descompuestos”, contó a El Litoral el jefe del Cuartel, Osvaldo Montanar.
Mensualmente el cuartel tiene una erogación promedio que oscila entre los 15 y 19 mil pesos, por combustibles y gasto fijos. “Es por eso que decidimos pedir ayuda a la comunidad”, dijo Montanar.
Para el desarrollo de sus tareas, los bomberos saladeños reciben “anualmente un subsidio nacional y un subsidio provincial, que el año pasado no recibimos”, detalló el jefe. Explicó además que “lo de Nación tiene rubros específicos, es decir que por ejemplo no podemos utilizarlo para el cargo de cuarteleros”.
Es por eso que necesitan reunir al menos 1.000 socios. Las que desean colaborar y apoyar la loable tarea que hacen los bomberos, muchas veces poniendo en riesgo sus vidas, pueden suscribirse y pagar mensualmente una cuota que fija, cuyo monto mínimo es de sólo $10.
Desde el cuartel de Saladas no sólo se atienden las emergencias de los más de 20 mil habitantes de la ciudad, sino también de las colonias aledañas. Recurren ante llamados por incendios y para colaborar en accidentes de tránsito, porque son los únicos en la zona que cuentan con todos los elementos necesarios, hasta Empedrado, San Roque, Tatacuá, Santa Rosa, Mburucuyá, donde también hacen de refuerzo para combatir el fuego cuando es necesario.
Entre las necesidades actuales para el mejor desempeño de sus actividades, los bomberos tienen que saldar el pago del arreglo de una camioneta cedida por la Provincia que no funcionaba y que la comisión se hizo cargo de la reparación. Esto demandó un costo total de 28 mil pesos, de los cuales ya se hizo una entrega de 12 mil.
También tienen como objetivo mayor la compra de una autobomba Ford 400, con capacidad de 1.500 litros de agua, doble cabina, modelo ‘92. “Tenemos un sólo camión, mediano, con el cual acudimos tanto para incendios como para accidentes, y lo tenemos repleto de distintos elemento, ya que queremos contar con todos lo necesario ante cada eventualidad”, mencionó Montanar.
Gentileza Diario El Litoral
En lo que va del año, desde el cuartel se realizaron en promedio, por mes, 34 salidas por incendios, 7 por accidentes viales y 4 por otros servicios.
Los Bomberos Voluntarios de Saladas necesitan juntar, por lo menos, 1.000 socios que colaboren para el sostenimiento de las actividades, que en bien de la comunidad realizan desinteresadamente los 365 días del año. El cuartel se mantiene con subsidios oficiales y el aporte de unas 150 personas. Con eso atienden los requerimientos de los 20 mil habitantes de la localidad y de los parajes aledaños.
“La realidad es que la situación económica general nos afecta notablemente, por la gran cantidad de emergencias que tuvimos, que nos demandaron un alto costo de combustible, y tuvimos vehículos descompuestos”, contó a El Litoral el jefe del Cuartel, Osvaldo Montanar.
Mensualmente el cuartel tiene una erogación promedio que oscila entre los 15 y 19 mil pesos, por combustibles y gasto fijos. “Es por eso que decidimos pedir ayuda a la comunidad”, dijo Montanar.
Para el desarrollo de sus tareas, los bomberos saladeños reciben “anualmente un subsidio nacional y un subsidio provincial, que el año pasado no recibimos”, detalló el jefe. Explicó además que “lo de Nación tiene rubros específicos, es decir que por ejemplo no podemos utilizarlo para el cargo de cuarteleros”.
Es por eso que necesitan reunir al menos 1.000 socios. Las que desean colaborar y apoyar la loable tarea que hacen los bomberos, muchas veces poniendo en riesgo sus vidas, pueden suscribirse y pagar mensualmente una cuota que fija, cuyo monto mínimo es de sólo $10.
Desde el cuartel de Saladas no sólo se atienden las emergencias de los más de 20 mil habitantes de la ciudad, sino también de las colonias aledañas. Recurren ante llamados por incendios y para colaborar en accidentes de tránsito, porque son los únicos en la zona que cuentan con todos los elementos necesarios, hasta Empedrado, San Roque, Tatacuá, Santa Rosa, Mburucuyá, donde también hacen de refuerzo para combatir el fuego cuando es necesario.
Entre las necesidades actuales para el mejor desempeño de sus actividades, los bomberos tienen que saldar el pago del arreglo de una camioneta cedida por la Provincia que no funcionaba y que la comisión se hizo cargo de la reparación. Esto demandó un costo total de 28 mil pesos, de los cuales ya se hizo una entrega de 12 mil.
También tienen como objetivo mayor la compra de una autobomba Ford 400, con capacidad de 1.500 litros de agua, doble cabina, modelo ‘92. “Tenemos un sólo camión, mediano, con el cual acudimos tanto para incendios como para accidentes, y lo tenemos repleto de distintos elemento, ya que queremos contar con todos lo necesario ante cada eventualidad”, mencionó Montanar.
Gentileza Diario El Litoral