El lamentable hecho ocurrió en horas de la tarde pasadas las 19,30 y 20 horas en el domicilio de la Supervisora de Escuelas Primarias Aidé Medina de Diez. Dos personas encapuchadas ingresaron a su finca en busca de dinero y al resistirse la golpearon fuertemente generándole serías lesiones en su cuerpo. La docente permanece internada en el Hospital María Auxiliadora pero según informaron desde el nosocomio estaría fuera de peligro. La policía local investiga el caso que conmueve a Saladas. La Foto es solo ilustrativa.-
En horas de la tarde de hoy pasadas las 19,30 horas la Supervisora Zonal de Escuelas Primarias Aidé Medina de Diez sufrió un robo en su propio domicilio en la localidad de Saladas. Dos personas desconocidas ingresaron a su casa y le propinaron una fuerte golpiza ya que querían saber donde estaban las cosas de valor dentro de la residencia.
La docente se encontraba sola en su casa al momento del lamentable hecho y la puerta estaba solamente arrimada. “Laly” como se la conoce dentro de la familia docente escucho que alguien ingreso y decidió saber quien era, es allí cuando se encuentra con dos personas desconocidas y encapuchadas quienes sin mediar palabras golpearon fuertemente y la llevaron hasta su habitación.
Según comentan allegados a la familia de Medina de Diez, ella logro escaparse de los cacos y corrió unos metros pero uno de ellos la siguió, la tomo del cabello y tras ello la golpearon salvajemente y la dejaron inconciente. Tras ello tomo el teléfono fijo y disco el número de su marido quien se encontraba trabajando.
Vale destacar que la Supervisora es esposa del Rector de la Escuela Técnica de la localidad Profesor Antonio Diez, quien al momento del robo no se encontraba en el lugar ya que estaba de reunión en el establecimiento que dirige.
La familia Diez vive en pleno centro de Saladas a solo dos cuadras de la plaza central y a cuatro de la comisaría departamental.
Fuentes judiciales informaron a este portal digital que tras la denuncia realizada por Aurelio Diez se encontraron con un panorama desalentador, ya que el domicilio estaba prácticamente “dado vueltas”, “se nota buscaban dinero y estaban decididos a encontrarlo y se llevaron celulares y objetos de valor”, dijo una alta fuente judicial a Saladas Informa.
La policía investiga el hecho pero hasta el momento comentaron que no tienen ningún dato que les pueda permitir avanzar ya que las primeras averiguaciones con los vecinos de la víctima fue totalmente negativa, es decir nadie vio, ni escucho nada.
La docente se encontraba sola en su casa al momento del lamentable hecho y la puerta estaba solamente arrimada. “Laly” como se la conoce dentro de la familia docente escucho que alguien ingreso y decidió saber quien era, es allí cuando se encuentra con dos personas desconocidas y encapuchadas quienes sin mediar palabras golpearon fuertemente y la llevaron hasta su habitación.
Según comentan allegados a la familia de Medina de Diez, ella logro escaparse de los cacos y corrió unos metros pero uno de ellos la siguió, la tomo del cabello y tras ello la golpearon salvajemente y la dejaron inconciente. Tras ello tomo el teléfono fijo y disco el número de su marido quien se encontraba trabajando.
Vale destacar que la Supervisora es esposa del Rector de la Escuela Técnica de la localidad Profesor Antonio Diez, quien al momento del robo no se encontraba en el lugar ya que estaba de reunión en el establecimiento que dirige.
La familia Diez vive en pleno centro de Saladas a solo dos cuadras de la plaza central y a cuatro de la comisaría departamental.
Fuentes judiciales informaron a este portal digital que tras la denuncia realizada por Aurelio Diez se encontraron con un panorama desalentador, ya que el domicilio estaba prácticamente “dado vueltas”, “se nota buscaban dinero y estaban decididos a encontrarlo y se llevaron celulares y objetos de valor”, dijo una alta fuente judicial a Saladas Informa.
La policía investiga el hecho pero hasta el momento comentaron que no tienen ningún dato que les pueda permitir avanzar ya que las primeras averiguaciones con los vecinos de la víctima fue totalmente negativa, es decir nadie vio, ni escucho nada.