Con algunos sobresaltos en la iluminación y sonido, este sábado 31 Saladas inició sus cuatro días locos de carnaval. El remozado corsódromo “Pedro Pablo Ignacio” albergó a más de 3 mil personas que aplaudieron y bailaron al ritmo de New Porá, Sambatuque, Coe Berá y Carisma Show. Además los presentes se deleitaron con el “Trensito de la Alegría” de Chiquimundo y rieron con el Grupo Martillazo y Ujhei Verá. La fiesta culminó pasadas las 7 horas del domingo.
Iniciaron los corsos saladeños y unas cinco mil personas colmaron las instalaciones del corsódrmo Pablo Ignacio, situado en el Complejo Turístico Presidente Kirchner, que lució con nueva infraestructura lumínica en su banda norte, tribunas, vallado perimetral y sonido, pese a que hubo que soportar una hora y media de retraso en el inicio por un problema de energía, según señalaron algunos organizadores.
El inconveniente energético, resultó parte del folklore que se vive siempre en torno a la Fiesta de Momo y de la que Saladas no es ajena, con un carnaval en franco crecimiento que involucra en forma directa e indirecta a gran parte de la sociedad formando parte de las comparsas y agrupaciones humorísticas representativas de los distintos barrios.
Sólo basta decir carnaval, para que se desate la polémica y el comentario a favor o en contra, la que también dura, lo que dura el efímero reinado de momo, con un condimento adicional, en éste, que es un año electoral, por lo que la política también se mezcla en este mundillo de nieve, purpurina, papel picado y disfraz. Es lo que tenemos y la gente saca sus conclusiones y disfruta, soslayando las críticas despiadadas y nihilistas que parecen querer destruirlo todo.
Superado el problema energético de alimentación de equipos y parte de la iluminación, a la cero hora arrancó la Fiesta de Momo, el Carnaval 2015 de la ciudad de Saladas, con el acceso a la avenida del sambódromo Pablo Ignacio de las agrupaciones de los más pequeños en cabezadas por Sambatuquines con su tema "La Leyenda de El Dorado y la Ciudad Perdida"; seguida por Chiquimundo y "El trencito de la alegría".
Los Coeberacitos, bailaron Al ritmo de Coé Berá, su tema en esta oportunidad; a la 1 hora y 31 minutos, ingresaban los menores de la comparsa de mayor hinchada en esta primera noche de corsos, Carismacitos 2015, representando América. Luego ingresó la primera agrupación de mayores, la humorística Ujhey Berá, representando a Los Picapiedras, siempre dándoles un toque de gracia al entusiasmo del carnaval.
Exactamente a las 2,48 horas, hacía su presentación, hacía su presentación encabezada por iluminados destaques New Porá, presentando su Tierra de Dragones. A las 3,45, llegó la banda más ganadora del carnaval saladeño Sambatuque, con sus trajes de conquistadores españoles en la búsqueda de la Ciudad de El Dorado, la ciudad perdida. Pasadas las 4,10, Martillazo decía que 30 años no son nada.
A las 5,03, entraba la multicampeona del Barrio Estación Coé Berá, siempre ordenada y de lujosa vestimenta, rescatando lo hecho hasta aquí Al ritmo de Coé Berá. A las 6,20 y brillando con el sol que despuntaba sobre la Laguna Soto, ingresaba la sorprendente Carisma Show 2015, encabezada por su escultural bastonera, la morena Daiana Pereyra, que gastó la avenida de punta a punta.
La escuela de samba de Carisma, dirigida por Hernán Sosa, fue algo destacado con sorpresa por muchos espectadores, que ponían el acento en la evolución lograda y que la pone a la altura de las mejores agrupaciones de percusión que podamos ver en los Carnavales Saladeños hoy. También hubo convicciones de que comenzado a hora y ajustando los horarios para evitar los baches que se observaron durante el desfile en esta primera noche, en las próximas jornadas el corso podría terminar entre las tres y cuatro de la mañana.
Pudieron haber falta de alguna lentejuela o partes de algún vestuario en algunas de las comparsas o agrupaciones, pero ellas, merecen un párrafo aparte, Las Reinas, tanto Belén Gorno, de Carisma Show; Nadia Piazza Simoni de Coaé Berá y Araceli Fernández de New Porá, estuvieron espléndidas y le queda al jurado la difícil tarea de tener que elegir a una de ellas como Reina del Carnaval Saladeño 2015.
El inconveniente energético, resultó parte del folklore que se vive siempre en torno a la Fiesta de Momo y de la que Saladas no es ajena, con un carnaval en franco crecimiento que involucra en forma directa e indirecta a gran parte de la sociedad formando parte de las comparsas y agrupaciones humorísticas representativas de los distintos barrios.
Sólo basta decir carnaval, para que se desate la polémica y el comentario a favor o en contra, la que también dura, lo que dura el efímero reinado de momo, con un condimento adicional, en éste, que es un año electoral, por lo que la política también se mezcla en este mundillo de nieve, purpurina, papel picado y disfraz. Es lo que tenemos y la gente saca sus conclusiones y disfruta, soslayando las críticas despiadadas y nihilistas que parecen querer destruirlo todo.
Superado el problema energético de alimentación de equipos y parte de la iluminación, a la cero hora arrancó la Fiesta de Momo, el Carnaval 2015 de la ciudad de Saladas, con el acceso a la avenida del sambódromo Pablo Ignacio de las agrupaciones de los más pequeños en cabezadas por Sambatuquines con su tema "La Leyenda de El Dorado y la Ciudad Perdida"; seguida por Chiquimundo y "El trencito de la alegría".
Los Coeberacitos, bailaron Al ritmo de Coé Berá, su tema en esta oportunidad; a la 1 hora y 31 minutos, ingresaban los menores de la comparsa de mayor hinchada en esta primera noche de corsos, Carismacitos 2015, representando América. Luego ingresó la primera agrupación de mayores, la humorística Ujhey Berá, representando a Los Picapiedras, siempre dándoles un toque de gracia al entusiasmo del carnaval.
Exactamente a las 2,48 horas, hacía su presentación, hacía su presentación encabezada por iluminados destaques New Porá, presentando su Tierra de Dragones. A las 3,45, llegó la banda más ganadora del carnaval saladeño Sambatuque, con sus trajes de conquistadores españoles en la búsqueda de la Ciudad de El Dorado, la ciudad perdida. Pasadas las 4,10, Martillazo decía que 30 años no son nada.
A las 5,03, entraba la multicampeona del Barrio Estación Coé Berá, siempre ordenada y de lujosa vestimenta, rescatando lo hecho hasta aquí Al ritmo de Coé Berá. A las 6,20 y brillando con el sol que despuntaba sobre la Laguna Soto, ingresaba la sorprendente Carisma Show 2015, encabezada por su escultural bastonera, la morena Daiana Pereyra, que gastó la avenida de punta a punta.
La escuela de samba de Carisma, dirigida por Hernán Sosa, fue algo destacado con sorpresa por muchos espectadores, que ponían el acento en la evolución lograda y que la pone a la altura de las mejores agrupaciones de percusión que podamos ver en los Carnavales Saladeños hoy. También hubo convicciones de que comenzado a hora y ajustando los horarios para evitar los baches que se observaron durante el desfile en esta primera noche, en las próximas jornadas el corso podría terminar entre las tres y cuatro de la mañana.
Pudieron haber falta de alguna lentejuela o partes de algún vestuario en algunas de las comparsas o agrupaciones, pero ellas, merecen un párrafo aparte, Las Reinas, tanto Belén Gorno, de Carisma Show; Nadia Piazza Simoni de Coaé Berá y Araceli Fernández de New Porá, estuvieron espléndidas y le queda al jurado la difícil tarea de tener que elegir a una de ellas como Reina del Carnaval Saladeño 2015.