En medio de algunas lágrimas y saludos emocionados, un centenar de chicos finalizaron sus estudios secundarios y lo celebraron con el tradicional baile de recepción de la Escuela Técnica de Saladas “Doctor Juan Gregorio Pujol”, que se realizó en el predio del Complejo Turístico Municipal “Presidente Néstor Kirchner”. La promoción de alumnos 2016, fue acompañada por unas tres mil personas que se dieron cita para acompañar a esta nueva camada de técnicos informáticos, electricistas y Peritos auxiliares en administración contable (Ver amplia galería de fotos).
Siempre existe un duelo, el de la institución y sus componentes, porque sus alumnos se van y en siete años ya hemos convividos y hasta acostumbrados en el trato y el de los alumnos que dejan ese lugar lleno de recuerdos, anécdotas y compañerismo que no se va a repetir de la misma manera en otros ámbitos donde les toque estar, pero se tienen que ir, la escuela ya los declara competentes para realizar otras actividades y para comenzar a ser un poco más autónomos en la vida, asumir otras responsabilidades o trabajar para ganarse el sustento diario y vivir.
Entrada la madrugada hubo el tradicional brindis y corte de tortas, las que en realidad abundaron. Luego lentamente los egresados comenzaron a despedirse con esta fiesta de la escuela y sus profesores, con el compromiso de volver a juntarse en algún momento y recordar y los docentes siempre predispuestos a responder a los ex alumnos en caso de que se los requiera en función de formaciones futuras y aquí está, además de la formación, el vínculo que se estableció durante esos siete años de esfuerzos y sacrificios, con sinsabores, pero también con la sensación de haber profundizado el conocimiento.
Finalmente alumnos, la institución que hoy dejan “les desea suerte, el mejor de los éxitos en su nueva vida como egresados y les recuerda que el conocimiento es un bien muy preciado, que se traduce en un título, el que hoy ustedes se llevan como técnicos que podrán ampliarlos y que el conocimiento es algo que nadie les podrá quitar, en este caso es también un aporte a la promoción social que recibirán de la comunidad en la que viven. El mejor de los éxitos”.
Entrada la madrugada hubo el tradicional brindis y corte de tortas, las que en realidad abundaron. Luego lentamente los egresados comenzaron a despedirse con esta fiesta de la escuela y sus profesores, con el compromiso de volver a juntarse en algún momento y recordar y los docentes siempre predispuestos a responder a los ex alumnos en caso de que se los requiera en función de formaciones futuras y aquí está, además de la formación, el vínculo que se estableció durante esos siete años de esfuerzos y sacrificios, con sinsabores, pero también con la sensación de haber profundizado el conocimiento.
Finalmente alumnos, la institución que hoy dejan “les desea suerte, el mejor de los éxitos en su nueva vida como egresados y les recuerda que el conocimiento es un bien muy preciado, que se traduce en un título, el que hoy ustedes se llevan como técnicos que podrán ampliarlos y que el conocimiento es algo que nadie les podrá quitar, en este caso es también un aporte a la promoción social que recibirán de la comunidad en la que viven. El mejor de los éxitos”.