Mientras los correntinos pagan la luz más cara de la región, el gobernador dice que “no puede hacer nada”
En una reciente entrevista radial, el gobernador Gustavo Valdés habló sobre la crisis energética que golpea a los hogares y comercios de Corrientes. Con un discurso lleno de contradicciones, el mandatario intentó desligarse de responsabilidad y culpar al Gobierno nacional de Javier Milei, pese a que su propio espacio político ha respaldado las medidas del presidente.
En sus declaraciones, Valdés afirmó que “no podemos hacer absolutamente nada” frente al aumento de la tarifa eléctrica. Sin embargo, Corrientes es la provincia que paga la luz más cara de la región, y la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (DPEC), bajo su gestión, ha aplicado incrementos descontrolados en el Valor Agregado de Distribución (VAD), que representa más del 52% del costo final de la boleta de luz.
El gobernador también responsabilizó a los usuarios, señalando que “80.000 correntinos que podían inscribirse en la tarifa social no lo hicieron”. Pero lo que no dice es que el Estado debe garantizar el acceso a esa información y facilitar el trámite, en lugar de usarlo como excusa para justificar tarifazos impagables.
Mientras tanto, el gobierno de Vamos Corrientes sí tiene recursos para fiestas, plazas y eventos, pero no para aliviar la carga de los trabajadores y comerciantes que cada mes ven cómo sus boletas de luz llegan con cifras exorbitantes.
El senador Martín Barrionuevo fue contundente al definir a Valdés como “un gran mentiroso”, ya que la estructura tarifaria de la DPEC depende de su gestión. Según datos oficiales, CAMMESA le vende energía a la provincia a un valor que representa solo el 47% del total de la factura, mientras que el otro 52% corresponde a costos de distribución impuestos por la propia DPEC.
A pesar de su discurso victimista, el gobernador no duda en alinear a sus legisladores con las políticas del presidente Javier Milei, el mismo que ahora usa como excusa para no intervenir en la crisis. Tampoco podemos olvidar que su candidata a presidenta, Patricia Bullrich, hoy es ministra de Seguridad del gobierno que él dice no poder enfrentar.
Corrientes necesita un gobierno que defienda a sus ciudadanos, no uno que les mienta en la cara mientras sigue castigando sus bolsillos.